_Daniel Ríos
jueves, 31 de julio de 2014
GENEALOGÍA DEL UNAMISMO _Marcos Alonso Cabello
_Marcos Alonso Cabello
miércoles, 30 de julio de 2014
jueves, 24 de julio de 2014
¿SOMOS DIFERENTES? Un relato infantil
_Adriana Toledano
sábado, 19 de julio de 2014
La imitación como aparato generador de conciencia
Por Adrián Silva
Curiosamente cuando se adjetiva a un sujeto como
“imitador” solemos remitirnos a la imagen de un niño reproduciendo conductas de
su “adulto significativo”(o quizá de un “referente virtual significativo”) o a la
de un adolescente “carente de personalidad” en búsqueda de aprobación social
identitaria. Sin embargo, dicha facultad imitativa es inherente a todo sujeto
durante cualquier etapa de su vida y lo sujeta a ciertos modelos culturales
hegemónicos.
Ahora bien, si nuestra conducta y gran parte de nuestro
aprendizaje cotidiano es constituido y constituyente a partir de la imitación ¿es
por ello que no sometemos a juicio de razón la “normalización”, tanto de
apropiación de realidades como de obediencia a la autoridad?
Si bien la educación integra una serie compleja
de prácticas sociales que se condensan en el individuo, es decir, que la
educación es la mediadora entre la conciencia social y la individual; ésta se
encuentra supeditada a una determinada concepción de la realidad, es así que la
práctica educativa transmite dicha concepción hegemónica. Por lo tanto, la
educación únicamente sujeta a los individuos a los designios de la normatividad
ideológica imperante. Y desde luego, el aprendizaje por imitación juega un
papel fundamental.
Si las escuelas forjaran realmente estudiantes
creativos, la cultura imperante se desplomaría, debido a que el objetivo fundamental,
tanto de la escuela como del alumno, sería, por un lado, una constante
invitación a la reflexión y por otro la búsqueda de la originalidad a través de
la liberación del espíritu. Sin embargo, la insistencia en concebir a la
educación escolar como reproductora de lo “ya dado” e “inalterable” reduce al
alumno a mero imitador de un “papel tradicional e imperante”, es decir, aquel
sujeto subordinado a los designios de la conciencia social normalizada.
De tal modo, la conciencia individual encadenada
únicamente imita y reproduce para evitar la desaprobación social y como mero
requisito de formación obligatoria, así como el medio para ubicarse dentro de
los eslabones ascendentes de la acumulación de capital.
Cuando los sujetos, en este caso los alumnos, no
pueden pensar debido a que únicamente imitan, lo único que serán capaces de
transmitir serán, por supuesto, los referentes de la normatividad ideológica
imperante, porque sólo esos se integrarán a su conciencia.
Y es por ello que cuando se normaliza una forma
de concebir la realidad es imposible concebir otras maneras de constituirla.
Entonces las escuelas, en realidad, son modeladoras de la irreflexión y la
obediencia.
jueves, 17 de julio de 2014
REMEMBRANZAS _Alejandra López Silva
_Alejandra López Silva
martes, 15 de julio de 2014
LAS FLORES SON SUICIDAS
_Adriana Toledano
jueves, 10 de julio de 2014
PODCAST ¿Acaso la moral es tan solo una ilusión?
miércoles, 9 de julio de 2014
lunes, 7 de julio de 2014
viernes, 4 de julio de 2014
PODCAST De pares, parejas y paradigmas
miércoles, 2 de julio de 2014
martes, 1 de julio de 2014
PODCAST Me arruinaron el tango (confusión en tres actos)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)